Pedro Félix García. El cambio de la sede de la cumbre del cambio (climático), en Madrid en vez de de en Chile, ha generado lógicos escrúpulos en la famosa joven ecologista Greta Thunberg, escrúpulos debidos a que, venir aquí desde Norteamérica en medios ‘normales’ (avión), iba a contribuir a la emisión de gases contaminantes.

El ‘black Swan’ navegando por el río Sena

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No se asusten ustedes que no vamos a proponer que Greta venga a Europa remando, ni tampoco a nado. Este artículo va en serio por más que esté encabezado por un dibujo de humor para llamar la atención del lector. Greta podría venir a España sin contaminar, a bordo de una embarcación totalmente eléctrica, y más que eso. Además de totalmente eléctrica, también muy ecológica, pues va impulsada por baterías de segunda vida. No se trata de una idea utópica. La referida embarcación existe, es real y navega ya por aguas del Sena. Se llama ‘Black Swan’. Pero es para uso fluvial.

Seine Alliance ha presentado recientemente su ‘Black Swan’, el primer barco eléctrico específico para cruceros privados y profesionales por el Sena, equipado con baterías de “segunda vida”. La idea de Seine Alliance y sus socios -Grupo Renault y Green-Vision- es poder demostrar la eficacia de un modelo basado en el principio de economía circular para reproducirlo y crear sinergias entre los distintos actores de la movilidad.

En un contexto de efervescencia generalizada para encontrar soluciones innovadoras para la conservación de nuestro planeta, las iniciativas de los profesionales del sector fluvial ofrecen perspectivas alentadoras. Están muy comprometidos con los aspectos ambientales de sus actividades y generan múltiples proyectos para poner de relieve su ejemplaridad en materia de transición energética. El ‘Black Swan’, barco «cero emisiones en el uso» para cruceros familiares de aproximadamente dos horas y con una capacidad para acoger a entre dos y ocho personas, ha sido diseñado con este propósito. Va propulsado por dos motores eléctricos y no dispone ni de grupo electrógeno ni de motor térmico de apoyo. Por lo tanto, no emite ningún gas de escape y navega sin ningún ruido. Se trata de un impactante proceso innovador de transformación para reducir el impacto ambiental en las actividades fluviales.

«París, ciudad organizadora de los Juegos Olímpicos en 2024, debe aportar soluciones innovadoras para el medioambiente. El Sena ya se distingue de forma ejemplar en términos de prestaciones energéticas en el sector de los transportes. Nuestra compañía materializa, una vez más, un proyecto de barco eléctrico con el objetivo de sensibilizar a todos los usuarios del río», ha declarado Didier SPADE, presidente y director general de Seine Alliance.

Croquis de la disposición general de los elementos del ‘Black Swan’

Economía circular y seguridad y confort a bordo

El ‘Black Swan’ está equipado con dos grupos propulsores 100% eléctricos, totalmente independientes y autónomos. Esta circunstancia le permite navegar de forma totalmente segura.

Al término de su “primera vida” en el automóvil, baterías de ion-litio procedentes de vehículos eléctricos Renault han sido extraídas y reacondicionadas para un nuevo uso. En el ‘Black Swan’ van alojadas bajo las banquetas laterales del barco en cuatro compartimentos de acero inoxidable especialmente diseñados para garantizar su estanquidad y seguridad del funcionamiento. De este modo, se evita el consumo de energía y de materias primas necesario para la construcción de baterías nuevas.

«Estamos orgullosos de contribuir al proyecto ‘Black Swan’ junto con Seine Alliance y Green-Vision. Este proceso demuestra, una vez más, que utilizadas como unidades de almacenamiento de energía en una segunda vida, las baterías de nuestros vehículos eléctricos son una palanca esencial para la aceleración de la transición energética», explica Gilles Normand, director de vehículos eléctricos del Grupo Renault.

Cada propulsor está unido a dos compartimientos para baterías que desarrollan una potencia nominal de 10kW (20kW en potencia máxima), permitiendo al barco alcanzar las velocidades de crucero habituales (la velocidad por el Sena en París está limitada). El peso total de las baterías es de 278 kg, inferior al peso del depósito de gasolina que equipa un barco equiparable en su versión térmica.

El casco -también reciclado- corresponde a un diseño atemporal del constructor italiano Tullio Abbate; conserva su línea dinámica. No hay motores fueraborda ni tampoco motores ‘in-bord’. La propulsión, y también el giro, se efectúan gracias a unas góndolas direccionales sumergidas (”pods”). La optimización técnica permite no recargar la línea del barco, optimizar la ergonomía del cockpit para facilitar la circulación y garantizar un confort máximo para los pasajeros que navegan en silencio. Dichos pasajeros pueden disfrutar de cruceros de una duración de dos horas, para un tiempo de recarga de las baterías de entre dos y tres horas.

Un barco inspirador para el resto del sector

La presentación mundial del ‘Black Swan’ tuvo lugar a primeros de noviembre en el espacio para eventos L’Atelier du France. Los profesionales del mundo fluvial reunidos en el Puerto de Grenelle en París, han podido descubrir un barco elegante y funcional que servirá de inspiración para los cerca de 150 barcos profesionales censados en el canal de París. Con ello, se demuestra que la migración hacia sistemas de propulsión más respetuosos con el medioambiente es posible.

En el primer trimestre de 2020 se realizarán demostraciones para la Prensa. Este mismo periodo será el de la entrada en pleno servicio del ‘Black Swan’ tras recibir las autorizaciones administrativas necesarias.

Seine Alliance iniciará entonces las obras de acondicionamiento de un nuevo barco análogo, antes de proseguir con otros barcos hasta alcanzar su objetivo de 2024, que consiste en disponer de una flota 100% eléctrica.

El ‘Black Swan’ es el primero de una nueva generación de barcos que constituyen todo un ejemplo de creatividad y neutralidad en cuanto a emisiones de carbono a la atmósfera, todo ello sin sacrificar la elegancia ni la funcionalidad. La sinergia desarrollada entre el Grupo Renault y Green-Vision demuestra que el reacondicionamiento inteligente de productos usados ayuda eficazmente al desarrollo sostenible.

Lástima que el ‘Black Swan’ sólo esté concebido como barco fluvial y no le sirva a Greta Thunberg para cruzar el Océano…

Este articulo fue publicado el 25 Noviembre 25Europe/Madrid 2019 a las 9:10 am y esta archivado en Motor. Puedes suscribirte a los comentarios en el RSS 2.0 feed. Puedes escribir un comentario, o hacer trackback desde tu propia web.