Por Redacción | Septiembre 26, 2013 - 8:56 am - Publicado en Viña y fogón

Redacción. Conservar las frutas en almíbar permite aprovechar mejor la compra y disfrutar de los sabores del verano en otras épocas del año.

MejorableAceptableBuenoMuy BuenoExcelente (4 votos, media: 5 de 5)
Loading ... Loading ...

La primavera y el verano son dos estaciones rebosantes de colores, sabores y matices. Melocotones, cerezas, ciruelas, peras de San Juan… La variedad de frutas que encontramos en estos meses no tiene punto de comparación. Todas ellas tienen una época de recolección concreta y un punto de maduración y conservación muy corto. Para disfrutar de sus bondades en otros momentos del año sin recurrir a las mermeladas o las confituras, podemos conservarlas enteras en almíbar. Septiembre es un mes apropiado para ello. A continuación, se explica cómo se elabora la fruta en almíbar y se ofrecen tres recetas deliciosas y sugerencias sencillas para realzar su sabor.

Fruta en almíbar casera: consejos generales

Para embotar y conservar en almíbar tendremos en cuenta unos principios básicos:

  • La fruta debe estar en buen estado, sin golpes ni demasiado madura. Si podemos elegir, casi es mejor que le falte un toque de madurez, ya que será sometida a un líquido caliente con azúcar y luego esterilizada con calor. Una fruta muy madura sufre más el proceso y puede quedar algo “tocada”.
  • Los tarros o botes que utilicemos tienen que estar limpios. Para ello, los desinfectaremos antes, al hervir tanto los botes como las tapas durante 5 minutos a 100ºC.
  • No llenaremos los tarros hasta arriba. Dejaremos unos 2 centímetros sin llenar, para que luego la presión no los haga estallar.
  • La fruta también debe estar limpia y esterilizada. Para conseguirlo, la herviremos durante un mínimo de 5 minutos a 100ºC. La fruta se cocinará dentro del bote de conserva, que es donde elaboraremos la fruta en almíbar.
  • Una vez elaborada la conserva, la guardaremos en un lugar seco, alejado de la luz y a temperatura fresca y constante (a ser posible a 18ºC).

  • Algunas frutas se pueden hacer con hueso o sin hueso, depende un poco del gusto de cada uno y la utilización que le queramos dar.

Cerezas, melocotones y peras en almíbar

Cerezas en almíbar. Necesitaremos: 300g de azúcar, 1 litro de agua y 400g de cerezas picota. Esterilizamos los frascos que tengamos intención de utilizar. Hervimos durante 5 minutos el bote y la tapa (cada uno por su lado) en una cazuela con agua. El bote debe estar totalmente cubierto de agua hirviendo. Escurrimos los botes y los rellenamos con las cerezas limpias hasta llegar a dos centímetros del borde del bote. Hacemos un almíbar ligero (hervimos el litro de agua con los 300g de azúcar) y con este almíbar rellenamos los botes con las cerezas hasta llegar a su altura, dejando siempre un espacio de dos centímetros entre la superficie del almíbar y el borde del bote. Cerramos e introducimos en una cazuela con agua hasta cubrir los recipientes por completo para que se cuezan durante 5 minutos a 100ºC. Apagamos el fuego y dejamos enfriar dentro de la cazuela. Una vez realizada la conserva, secamos el bote, etiquetamos con el nombre del producto y la fecha de elaboración, y conservamos en un lugar fresco, sin luz y sin humedad.

Melocotones en almíbar. Necesitaremos: 1 litro de agua, 400g de azúcar y 2 kilos de melocotones amarillos. Pelamos y quitamos los huesos de los melocotones. Rellenamos los botes (antes esterilizados) con las mitades del melocotón, colocándolas de manera artística. Hacemos un almíbar ligero, cociendo durante 2 minutos el azúcar en el agua. Llenamos los botes de melocotón con el almíbar (sin olvidar los 2 centímetros que deben quedar sin rellenar para que no estallen con la presión). Cerramos los recipientes y los introducimos en una cazuela con agua hasta cubrirlos. Llevamos a ebullición, esperamos 15 minutos, sacamos la cazuela del fuego y dejamos que el conjunto se enfríe. Secamos y etiquetamos (con nombre de la conserva y fecha de producción), antes de guardar en un lugar seco y protegido de la luz con una temperatura no superior a los 20ºC.

Peras en almíbar. Necesitaremos: 1 kilo de peras blanquillas, 400g de azúcar, 1 litro de agua y el zumo de 1 limón. Según el tipo de pera, añadiremos más o menos azúcar: a pera más sosa, más azúcar; a pera más dulce, menos azúcar en el almíbar. Lo elaboramos con el agua, el azúcar y el zumo del limón. Pelamos las peras, quitamos las semillas y troceamos en mitades. Las introducimos en los frascos esterilizados, donde también vertemos el almíbar templado, dejando los 2 centímetros libres entre la superficie del contenido y el borde del recipiente. Cubrimos los botes con agua y los llevamos a ebullición durante 20 minutos. Dejamos que se enfríen en la cazuela donde hemos realizado la esterilización. Secamos y etiquetamos con nombre de la conserva y fecha de producción antes de almacenar en un lugar seco y protegido de la luz, con una temperatura inferior a los 20ºC.

Almíbares: sugerencias para realzar su sabor

A los almíbares se les puede dar un toque aromático si agregamos trocitos de canela o de vainilla, un poquito de jengibre, raspadura o zumo de limón. Sea cual sea el ingrediente que elijamos para poner en infusión, siempre deberemos colar el almíbar antes de agregar a la fruta para que quede lo más transparente posible.
También podemos agregar algún tipo de licor al almíbar (como aguardiente o coñac) para que la fruta adquiera ese toque alcohólico, aunque esto debe hacerse con moderación. La proporción no debe ser más de 50% alcohol y 50% agua para elaborar el almíbar; de otro modo, resultará demasiado fuerte y “matará” el sabor de la fruta.


Este articulo fue publicado el 26 Septiembre 26Europe/Madrid 2013 a las 8:56 am y esta archivado en Viña y fogón. Puedes suscribirte a los comentarios en el RSS 2.0 feed. Puedes escribir un comentario, o hacer trackback desde tu propia web.

Escribe un comentario

Nota: Los comentarios de nuevos usuarios son revisados por el moderador antes de publicarse.