Fotografía: Antonio Adeliño | Estelas Funerarias en Villatuelda

Antonio Adeliño Vélez. El reciente hallazgo por mi parte de un fragmento de estela funeraria medieval en el cementerio que circunda la iglesia de Villatuelda (Burgos), me anima a relatar las vicisitudes de estos elementos funerarios, que forman parte del patrimonio histórico artístico y que deben ser conservados aunque sólo sea por el hecho de haber llegado a nuestros días, sorteando la intemperie de los siglos.

Desde niño, siempre oí a los viejos del lugar que las dos cruces de piedra del cementerio señalaban la sepultura de dos curas. Y no seré yo quien contradiga al imaginario popular, cuando en una de las estelas aparece la cruz patada templaria que podría indicar el enterramiento de un monje soldado de la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo y del Templo de Salomón.

Fotografía: J.Marqués | Iglesia de Villatuelda

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Antes de hablar de la procedencia y hallazgo de las estelas que motivan estas líneas, cabe decir que vamos a describir unos mojones antropomorfos de piedra, labrados con una intención funeraria para indicar la cabecera de una sepultura cristiana.

En el anverso está cincelada en relieve una cruz de Malta de seis brazos”.

Estas pequeñas esculturas funerarias se utilizaron profusamente en la edad antigua, aunque el modelo de estela discoidal con corona circular y pie trapezoidal o rectangular, se generaliza en la edad media como monumento conmemorativo cristiano. La elección de la piedra como material constructivo, se explica por el deseo de perdurabilidad que el difunto quería mantener en las generaciones venideras.

En la iglesia de Villatuelda tenemos recogidas tres estelas completas y fragmentos del disco de otras dos. Jacinto Campillo Cueva en su estudio de Las estelas cristianas del valle del Esgueva burgalés, se refiere a otro fragmento colocado en la pared interior de un jardín particular que no he tenido la oportunidad de observar, y que incluimos al final del artículo según la describe el referido autor.

Decía al principio que dos estelas (nº1 y nº2) se hallaban en el cementerio que circunda la iglesia, hasta que en 1997 con motivo de acometerse obras de saneamiento en el exterior de la iglesia, las trasladamos al atrio del templo y unos años más tarde al interior. La tercera (nº 3) la hallamos como material de relleno en una mesa de altar fabricada con sillares de piedra que estaba adosada al muro sur y que se eliminó en las obras de restauración iniciadas en 1994.

Interior del Templo

El disco hexapétalo (nº 4) apareció el 1996 en la parte baja del vano de la campana central de la espadaña, cuando al quitar unas piedras para darle la inclinación apropiada al suelo con el fin de que no se acumulara el agua de lluvia, se apreció en la argamasa seis pétalos de flor; habíamos encontrado la corona de una estela hexapétala. El fragmento de disco (nº 5) que motivan estas líneas, le encontré en febrero de 2016 en el cementerio después de que los sepultureros dejaran arrinconadas unas piedras sacadas de una fosa y la lluvia limpiara la tierra de una de ellas para dejar a la vista tres brazos de una cruz de Malta.

A modo de catálogo se describen las referidas piezas funerarias.

Estela nº 1. Estela discoidea de piedra caliza blanca. Procede del cementerio que circunda la iglesia. Mide 78 cm de altura, con corona discoidal de 37 cm y pie trapezoidal de 41 cm. Su grosor es de 19 cm. El disco está decorado en su parte frontal con una cruz griega patada en relieve dentro de una orla circular en resalte.

Estela nº 2. Estela discoidea de piedra caliza blanca. Procede también del cementerio. Mide 70 cm de altura. Su disco mide 36 cm de diámetro. El pie mide 34 cm, es rectangular aunque la base aparece redondeada por el progresivo descascarillado que producen los hielos en los materiales porosos. Su grosor es de 13 cm. El anverso del disco está decorado con una sencilla cruz latina incisa.

Estela nº 3. Estela discoidea de piedra caliza blanca. Hallada como material de relleno en una mesa-altar adosada al muro sur del templo. Le falta un pequeño trozo en el lateral de la corona. Mide 63 cm de altura, con disco de 39 cm y pie trapezoidal de 24 cm. Su grosor es de 16 cm. El reverso presenta una cruz de Malta en relieve, rodeada por una bordura resaltada. En el anverso está cincelada en relieve una cruz de Malta de seis brazos, separados por seis óvalos hundidos a modo de pétalos que recuerda las estelas hexapétalas. También la circunda una bordura en resalte.

Estela nº 4. Se trata de un disco de estela en piedra caliza casi completo. Es la más antigua y su ornamentación geométrica nos recuerda la época visigoda. Apareció como material de relleno en el vano de una campana de la espadaña. El trozo que falta en el disco, corresponde a la unión con el pie que se ha perdido. Mide 29 cm de diámetro y 13 de grosor. Está decorada con una estrella o flor hexapétala de bordes incisos, rodeada por un círculo inciso.

Estela nº 5. Fragmento de disco de estela en piedra caliza blanca. Corresponde a la mitad casi completa de la parte superior de la corona. Está adornada con una cruz de Malta en resalte, con el brazo superior completo, y cortados por la mitad los dos laterales. La longitud completa del disco es de 35 cm y la parte mutilada es de 22 cm. Su grosor es de 12 cm. Apareció en 2016 en el cementerio.

Estela nº 6. Fragmento de disco de caliza blanca. Tiene 28 cm de diámetro, 19 de altura y 14,5 de grosor. Su cara visible está decorada con una flor hexapétala hundida. Se halla en el jardín de una casa particular, sujeta con cemento a la cara interna de la pared.

Este articulo fue publicado el 27 Julio 27Europe/Madrid 2016 a las 7:22 am y esta archivado en Cultura. Puedes suscribirte a los comentarios en el RSS 2.0 feed. Puedes escribir un comentario, o hacer trackback desde tu propia web.