Jorge Romero. Dicen que hoy es el día más romántico del año y aunque muchos no conocen la historia que hay detrás de esta popular fiesta, son millones de personas las que lo celebran.

Ramos de rosas, peluches, bombones, una joya. Hay mil cosas que podemos regalar a nuestra pareja para demostrar el amor que sentimos y celebrar este día tan especia. Nosotros, nos lo vamos a currar un poquito más y os vamos a proponer un menú para que sorprendas con una cenita de lo más romántica. ¿Te animas?

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Comenzaremos decorando la casa. Podemos poner unas velas aromáticas a la entrada, dejar notitas románticas por la casa, luces tenues, música suave, pétalos de rosa sobre la cama… y todo aquello que se nos ocurra.

Una vez acabada la decoración, toca meterse en la cocina. Iremos preparando todos los platos, para que cuando llegue, esté ya todo organizado y preparado y así poder dedicarle toda la noche.

Prepararemos unos entrantes muy sencillos refrescantes y sofisticados:

Salmón marinado con piña y aguacate

Primero picamos el lomo de salmón fresco en cuadraditos pequeños (como para comer dos de un solo bocado) y se marinan en un recipiente con unas cucharadas de zumo de piña y un par de cucharadas de salsa teriyaki. Hay que dejar que repose en el frigorífico durante unos 30 minutos. Mientras, troceamos una rodajita de piña natural y un aguacate pelado del mismo tamaño que los trocitos de salmón. Con un poco de los jugos del marinado se aligeran cuatro cucharadas de mayonesa, que se colocarán en la base de unas cucharillas de servicio. Encima de la mayonesa ponemos el salmón marinado y escurrido, acompañado de trocitos de aguacate y piña. Se decora con unos trocitos de cebollino fresco y unas gotitas de aceite de oliva virgen extra.

Paté casero de atún y pimientos del piquillo

Escurrimos 250 gramos de atún (sirve una lata con aceite o de escabeche) y lo colocarlos en el bol de la batidora junto con un par de pimientos del piquillo escurridos, dos cucharadas grandes de queso cremoso, unas gotas de zumo de limón y unas gotas de tabasco. También añadimos una gran cucharada de mayonesa ligera y una cucharadita de aceite de oliva virgen extra. Trituramos todo hasta obtener una mezcla de consistencia homogénea que se debe poner en un recipiente para servir en la mesa y poder picotear. Lo servimos acompañado de panecillos o colines para untar.

Ahora nos ponemos con el plato principal. Recomendable algo para compartir ya que así no será una cena demasiado pesada. Una recomendación son los pescados asados con una guarnición, como chutney agridulce o cremas de setas, o un ave, como un magret de pato, por ejemplo, con una guarnición de frutas.

Pollo asado al horno con salsa de cava

Necesitamos comprar un pollo troceado. Le ponemos sal y una pizca de pimienta molida. Pelamos y picamos dos dientes de ajo y lo mezclamos con el zumo de un limón. Se unta con esta mezcla la base de la bandeja de horno y sobre ella se colocan los trozos de pollo salpimentados. Lo introdicimos todo en el horno ya caliente a 200 ºC durante 70 minutos. A mitad de cocción se vierte una copa de cava sobre el pollo y, una vez terminado el asado, sacamos los trozos de pollo y los ponemos en un plato aparte. Recuperamos los jugos del asado y los ponemos en un recipiente. Añadimos un vasito de cava y otro de caldo de ave. Se calienta para que se unan los jugos y se agrega un poco de maicena para ligar la salsa. Se pone a punto de sal y se calienta la salsa para acompañar al pollo asado.La guarnición pueden ser unas patatitas con zanahorias asadas, uvas salteadas, unas gotas de aceite de oliva y una pizca de sal en escamas.

Salmón asado con chutney de mango y jengibre

El primer paso es preparar el chutney de mango y jengibre. En una sartén, se saltea un cuarto de cebolla cortada en brunoisse (cuadraditos pequeños) con un mango pelado y troceado también en pequeños daditos. Cuando se dore el conjunto, se agrega el zumo de medio limón, el azúcar, un poco de jengibre fresco rallado, una pizca de pimienta de Cayena y un poco de vinagre de arroz. Se cocina el chutney a fuego suave durante una hora hasta que adquiera una consistencia de compota o de mermelada agridulce. Luego, se limpian los lomos de salmón de espinas y, si se desea, también de piel. Después, se pelan los ajos, se pican con una batidora hasta hacerlos diminutos y se mezclan con el aceite y la sal. Con la mezcla que resulta, se untan los lomos y se colocan sobre una bandeja. Se introducen en el horno ya precalentado y se asan durante 15 minutos a 200 ºC. A media cocción, se agrega un vasito de vino blanco con unas hojas de perejil cortadas y picadas junto con el vino blanco. Una vez realizada esta tarea, se introduce de nuevo la bandeja en el horno y se deja el tiempo necesario para que se terminen de asar los lomos de salmón. Por último, el salmón se acompaña con los jugos del asado y el chutney de mango y jengibre.

La mejor manera de terminar una cena romántica de San Valentín es con un postre de campeonato. Por un lado, está la opción sencilla de tenerlo ya preparado en el frigorífico y, por otro, hacer un postre al momento, como el coulant rápido en el microondas, una alternativa para los más atrevidos y atrevidas.

Coulant de chocolate rápido en microondas

Primero, se derriten 300 gramos de chocolate con 150 gramos de mantequilla en el microondas durante unos 30 segundos a potencia media. En un bol, se baten cuatro huevos con 150 gramos de azúcar hasta que quede espumoso. Se incorpora el chocolate derretido poco a poco y se remueve. Se tamizan 150 gramos de harina y se añaden al bol. Se mezcla todo bien. Por otro lado, se engrasan los moldes individuales y se espolvorean con el cacao en polvo, se coloca una onza de chocolate en el centro de cada uno y se llenan unas tres cuartas partes con la mezcla que se ha preparado. Cada coulant se cocina de uno en uno durante un minuto en el horno microondas a 800 W. Cuando el centro del coulant de chocolate se eleve, ya estará en su punto y se deberá sacarlo del horno. Una vez fuera, se dejan templar, se desmoldan y se sirven. Se puede espolvorear ligeramente con azúcar glas y, también, dar un corte justo cuando se sirva para que salga el centro semilíquido del coulant de chocolate. Para decorarlo no hace falta más que unos frutos rojos o un coulis de frambuesa.

Smoothie de frambuesa con yogur

Se lavan 300 gramos de frambuesas, se espolvorean con dos cucharadas de azúcar y se introducen en el congelador durante un par de horas. En el momento de preparar el smoothie, se sacan las frambuesas del congelador, mientras que del frigorífico se hace lo mismo con 400 gramos de yogur y 400 ml de bebida de soja. Se mezcla el yogur natural con la bebida de soja. La mezcla resultante se coloca en un vaso de batidora junto con las frambuesas heladas y se tritura todo hasta conseguir una textura cremosa. Si nos gusta notar los trocitos de frutas, no habrá que triturar hasta el final para evitar que se deshagan por completo. Se sirve al momento con unas pajitas y se decora con unos trocitos de frambuesas y unas hojitas de hierbabuena.

Después de una apetitosa cena, si a los dos os gustan las películas o series, un plan genial para pasar la velada de San Valentín es ver alguna juntos…. después, lo que surja. ¡¡Feliz San Valentín!!

Este articulo fue publicado el 14 Febrero 14Europe/Madrid 2023 a las 6:20 am y esta archivado en Viña y fogón. Puedes suscribirte a los comentarios en el RSS 2.0 feed. Puedes escribir un comentario, o hacer trackback desde tu propia web.