Jorge Romero. De arroz, de soja, huevo, maíz, trigo… los fideos chinos son uno de los alimentos que más se consumen en el mundo. Básicamente porque son económicos, fáciles de hacer, se cuecen muy rápido y puedes prepararlo con los ingredientes que más te gusten ya que admite un montón de variaciones.

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Pueden estar hechos de trigo (típicos de la parte norte de China) o de arroz (más populares en el sur). También hay una minoría que están fabricados con almidón de frijol mungo, también conocido como soja verde (Vigna radiata).

A la hora de la cocción, debemos saber que los fideos chinos se cuecen más rápido que otro tipo de fideos. esto es debido a su tamaño y su constitución. Por lo general, cinco minutos en agua hirviendo son suficientes, aunque también hay fideos a los que basta con agregarles una taza de agua caliente para que estén rehidratados y listos para comer en apenas un minuto. Siempre digo que es recomendable mirar las etiquetas del envase.

Importante también el tema de la sal; los más simples ya la llevan añadida (al menos un poco), a otros se les ha incorporado esencias de marisco, pollo o ternera, por lo que, al estar elaborados con aromas y especias, no es necesario añadirla en el agua de cocción.

Sugerencias de preparación

Sopa de fideos chinos
Unos de los fideos chinos más famosos son los noodles. Están hechos con harina de trigo y son un poco más gruesos de lo normal. Son idóneos para preparar una deliciosa sopa de verduras, pescado o marisco.

Si nos gusta el sabor marinero, se puede hacer una sopa con langostinos. Se pelan primero los langostinos crudos. Durante media hora a fuego suave se hierven sus cáscaras y cabezas en un litro de agua junto con un poco de zanahoria y puerro, cortados en tiras. Después hay que colar el caldo, añadir unas gotas de salsa de soja e introducir los fideos chinos y los langostinos pelados. En cinco minutos estará lista la sopa.

Fideos chinos fritos o salteados
Los fideos fritos o chow mein son una de las recetas más conocidas de la cocina china. Para hacerlos, el truco es cocerlos (o rehidratarlos) primero. Una vez que estén blandos, se saltean en un wok junto con verduras frescas como cebolleta, espinacas o pimientos. Se añaden también unos brotes de soja o de bambú y se sazona en el último momento con un toque de salsa de soja.Es un plato sano y muy práctico, que se hace en pocos minutos.

Fideos con toque oriental
Los fideos chinos más gruesos, más allá del cereal con el que se hayan elaborado, admiten preparaciones del recetario occidental (en general, cocidos y con una salsa al gusto). Sin embargo, lucen todo su potencial cuando se les da un toque más oriental.

Para ello, lo mejor es utilizar productos típicos de Asia, como brotes de bambú, salsa de soja, capullos de lirio seco, aceite de semillas de sésamo, castañas de agua, especias chinas en polvo, hortalizas de Sichuan en conserva o setas chinas desecadas. A la combinación que se elija se le añadirá después un salteado de verduras, pollo, carne o marisco y, después, se terminará de cocinar todo el conjunto en el wok.

Fideos chinos como guarnición
Los fideos que se rehidratan con mucha facilidad también pueden servir como guarnición. El resultado es espectacular si se usa la técnica de la fritura, como si fuesen churros.

Para ello, se fríen directamente los fideos en un cazo con abundante aceite, muy caliente. Al introducir unos pocos fideos secos, tal cual salen del paquete, se ve que al contacto con el aceite se inflan. Se sacan al instante y se colocan en un plato con papel de cocina para eliminar el aceite sobrante. Estos fideos fritos sirven como decoración o como base para colocar sobre ellos una ensalada, un poco de marisco salteado o unas verduritas apenas cocidas.

Este articulo fue publicado el 21 Octubre 21Europe/Madrid 2022 a las 5:11 am y esta archivado en Viña y fogón, ► Sabores ◄. Puedes suscribirte a los comentarios en el RSS 2.0 feed. Puedes escribir un comentario, o hacer trackback desde tu propia web.